miércoles, 10 de noviembre de 2010

UNIDAD DE EQUIPAMIENTO URBANO

HUERTO URBANO

Tomo como referencia el dato aportado en el programa de la asignatura  sobre  la procedencia cada vez  más  alejada  de  las  frutas  y  las  verduras  utilizadas  a  diario  y lo que ello conlleva en cuanto a gasto energético con el obligado transporte que dicho hecho comporta.

Inicio mi estudio en la dirección comentada y enseguida deduzco que la  variante  que nos interesa es la del huerto , entendido como un espacio abierto y más polivalente que el invernadero, espacio más cerrado y específico.

Empalmando  la  práctica  anterior  con  la  actual,  seguimos  estudiando la problemática económica actual,  las  necesidades  de  una  sociedad  diferente  a  la  de  hace  unas  décadas y sus preocupaciones, e introducimos la concienciación del agotamiento de los recursos.

Introduciéndonos en el mundo agrario,  sobre  el  que  trabajaremos,  encontramos  repetidamente la afirmación  de  que  los  métodos de producción que  estamos  utilizando  actualmente  han  demostrado  ser inviables tanto por razones medioambientales como por razones económicas y sociológicas.

Las reflexiones  de  la comunidad científica sobre el futuro de la agricultura en la Unión Europea sitúa la calidad en el centro del proyecto.

Ésta  es  la  una  actitud  que va tomando la sociedad a partir de dos vertientes, los beneficios de una alimentación sana y equilibrada con abundancia de verduras y fruta fresca, y por otro lado, la advertencia  de los serios peligros para la salud,  a  corto  y  a  largo  plazo,  de  la  presencia  en  los  alimentos de restos de plaguicidas  y  de  infinidad  de  sustancias  tóxicas que se han ido añadiendo en los procesos de producción, transformación o comercialización.

Problemática  la  de  los  abusos  químicos  centrada  en  la  hasta ahora filosofía de obtención de los máximos beneficios al mínimo coste. Mayor cantidad a sacrificio de la calidad del producto.

Todo ello nos  lleva  a  plantearnos  la  necesidad  de consumir alimentos con garantía de producción ecológica,  si  realmente  estamos  preocupados  por  nuestra  salud,  la  de  nuestros hijos y la del planeta en conjunto.

La agricultura ecológica tiene por objetivo fundamental la obtención de alimentos de máxima calidad, respetando  el  medio  ambiente  y conservando la fertilidad de la  tierra,  mediante  la  utilización  óptima  de recursos naturales,  excluyendo  el  empleo  de  productos  químicos  de  síntesis y procurando un desarrollo agrario sostenible.

Estamos hablando de una  práctica  que  comenzó  a  finales  de  los 80 en España y que a finales de 2005 significaba únicamente un 2,48 % de la superficie agraria  útil  española. Y además se estima que cerca del 80 %  de  la producción ecológica se exporta,  principalmente  a  Alemania,  Holanda,  Francia  y  Reino Unido.

El principal hándicap que ha tenido siempre  la  agricultura  ecológica  ha  sido  el  coste resultante de consumo.

Es por eso que se coloca a la sociedad entonces en un punto crítico a la hora de elegir sus productos agrarios de consumo cotidiano, pues por un lado está la economía, por otro la salud y por otro la conciencia medioambiental.

El mayor coste de los productos ecológicos está más que justificado pero  comprensiblemente  a  día de hoy, muchas familias no pueden ni plantearse el dilema anterior.

Llegados a éste punto, mi propuesta pasa por las posibilidades de cultivo propio.

Me planteo el crear una unidad de equipamiento  móvil  desmontable  con  función docente enfocada a la concienciación de la necesidad de  la  agricultura  ecológica,  a  la  enseñanza  de  los  métodos  para  su funcionamiento y a la promoción de los huertos propios.

Se promocionaría  entonces  una  actividad altamente gratificante, incluso terapéutica, ya que además de la obtención de alimentos sanos, supondría un  beneficioso  acercamiento  a  la  naturaleza  yun mínimo de ejercicio físico.

Sería entonces, mi objeto a proyectar,  un  huerto  o  la  suma  de  muchos  pequeños huertos dando como resultado un huerto urbano, que sería utilizado y del que se beneficiarían, los residentes o trabajadores de la zona durante un cierto tiempo, a lo largo del cual podrían  adquirir  la  buena  costumbre  y  la  práctica suficiente para crear su zona de cultivo propia.

Pasado un tiempo establecido, nuestra unidad sería transportada a otro punto del barrio para cumplir de nuevo su función

         

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